sábado, 31 de octubre de 2015
What to do when you don't trust in your team
lunes, 7 de septiembre de 2015
¿Cómo elegir a tu pareja de toda la vida?
sábado, 5 de septiembre de 2015
Ocho Lecciones de Frank Underwood que usted puede aplicar
Esta semana conversaba con un grupo de colegas acerca de los negocios en el mundo del crimen que arrojan beneficios mundiales a estas redes, superiores a 3 billones de dólares. De ninguna manera las mentes criminales podrían ser un paradigma a seguir en un mundo que clama por un sentido profundo de desarrollo de practicas éticas en todos los campos de acción del ser humano. Sin embargo, si hay enseñanzas importantes provenientes de estos genios del mal; un ejemplo que invito a analizar es el de Frank Underwood protagonista de la serie House of Cards.
Frank Underwood no es un simple villano. El es obstinado, disciplinado, con un alto nivel de autocontrol y cuida tanto de su reputación como de su propia vida; todo esto lo hace un hombre peligroso. De su actuar se puede aprender sobre qué no hacer, pero también qué replicar, porque aunque se trata de un político corrupto que está dispuesto a todo por el poder en la serie de Netflix House of Cards, hay varias habilidades que aplaudirle y que sirven en el trabajo. Ravi Freitas, del portal brasilero administradores.com.br hace un recuentode estas características.
1. Obstinación: Frank no desiste de lo que quiere. Desde muy temprana edad su sueño era ser presidente de los Estados Unidos, cargo al que llegó después de una mezcla de esfuerzo y crímenes.
2. Disciplina. no es sólo el foco lo que transforma a un político en una máquina para alcanzar objetivos, es el hecho de no dejar que nada lo interrumpa para llegar a donde llegó.
3. Autocontrol. explotar en el lugar de trabajo es algo que no se debe hacer, porque genera estrés en aquellos que trabajan a su alrededor y dará una mala imagen de usted.
4. Trabajar en grupo. puede parecer extraño que una persona tan enfocada en sus propios objetivos y egoísta sepa trabajar en grupo, pero el hecho de saber lo que es mejor para él, lo hace necesitar trabajar con otras personas.
5. Planificación estratégica. Underwood no llegó hasta donde está por sólo suerte y voluntad, sino por planificar, nada de lo que él hace es puro instinto.
6. Liderazgo. Underwood llegó a despertar una lealtad en algunos de sus empleados más cercanos, que asustaba a los espectadores; porque entre sus habilidades se cuentan ser inteligente y capaz de sacar lo mejor de las personas.
7. Reputación. Underwood comprende muy bien cuál es la importancia de tener una buena reputación. Y consigue mantenerla. Y para usted, que no es un político corrupto, es más fácil. Cuide su imagen personal.
8. Descansar y relajarse. Descansar es una parte importante del personaje, porque el cansancio lo puede llevar a tomar malas decisiones debido a la falta de capacidad cognitiva.
Los quiero invitar a analizar en detalle a estos personajes y extractar los más convenientes aprendizajes en un ambiente de debate, que enriquezca nuestro actuar diario y nos permita hacer de nosotros mejores seres humanos.
miércoles, 12 de agosto de 2015
¿EMPRESARIO O EMPLEADO?
Los empleados son el recurso orientado. Los empresarios son orientados hacia la oportunidad. Es buen momento para compartir este valioso artículo que me llegó.
Seguramente ha habido momentos de angustia en tu trabajo en los que te dices: ¡Cuánto me gustaría ser mi propio jefe! Muchos profesionales que sueñan con un ascenso o con ser jefes algún día, en algún momento se sorprenden pensando en emprender y dedicarse a lo que más les apasiona. ¿Cuántos lo logran? En realidad el 90% lo deja en una hermosa idea. He aquí la diferencia entre empleados y emprendedores.
Para Keith Cameron Smith, empresario, coach y autor de libros como “El espíritu millonario” y “Las diez principales diferencias entre los millonarios y la clase media”, asegura en su nueva publicación “Las 10 diferencias entre empleados y emprendedores” que no hay manera de conseguir lo que uno más quiere, que trabajar en ello.
“Definitivamente no te convertirás en un empresario exitoso si te quejas o si tratas de justificar el por qué no salieron las cosas (…) debes moverte hacia adelante, hacia el futuro que deseas. Culpar, quejarse y tratar de justificarte te mantiene atascado en el pasado”, indica el autor.
Pero, ¿cómo empezar a ser diferentes? La respuesta es sencilla, con diez factores diferenciadores:
1. Los emprendedores se educan más de lo que se entretienen
No sólo hablamos de tener carrera, especialidad, maestría o doctorado, hablamos de obtener lo que más se valora dentro del mercado: la experiencia. Muchos pensarán que este punto es un poco drástico o radical. Pero no se trata de pasar jornadas 24/7 en el trabajo sin salir a divertirte, simplemente es que para los empleados es más sencillo salir a “la fiesta del amigo” que sentarte a actualizar tus pendientes, inscribirte al curso que tanto te hace falta o comenzar el proyecto personal que siempre has deseado. ¡Piénsalo bien, es el primer paso!
2. Los emprendedores tienen una poderosa perspectiva del fracaso
Es definitivo, el fracaso será parte de la vida de cualquier profesional, pero ese no es el problema, éste radica en la percepción, y cuando hablamos de fracasos, sólo existe una: tomarlo de manera positiva. Para Cameron Smith, el fracaso es sinónimo de retroalimentación, asegura que las lecciones más poderosas pueden conseguirse a través de éste y que las mejores ideas pueden surgir una vez que se toca el suelo. Así que tranquilo si te has tropezado, siempre hay momento para levantarse, mirar a tu alrededor y continuar caminando, recuerda, es cuestión de percepción.
3. Los emprendedores encuentran soluciones, los empleadossolucionan problemas
Si el problema que solucionaste el trimestre pasado volvió a surgir, quiere decir que estás haciendo mal las cosas, encontrar soluciones momentáneas es como comprar cosas baratas: no duran mucho y siempre salen más caras. Cuida que la solución sea aplicable para toda ocasión, asegúrate de adelantarte a aquellos problemas que seguro serán un obstáculo y cuida en tener siempre un plan B, esto sí funciona.
4. Los emprendedores saben poco de muchas cosas, los empleados saben mucho de pocas
“SODA: Simplificación, Organización, Delegación y Automatización. Éstas son cuatro de las muchas cosas sobre las que se debe saber poco para llegar a ser un emprendedor exitoso. El tiempo la energía y el dinero que inviertas en aprenderlas será poca cosa, pues te ayudarán a experimentar más exitosos y menos fracasos”, indica en el autor en su reciente publicación.
5. Los emprendedores dan y reciben halagos y correcciones, los empleados no halagan y evitan ser corregidos
¿Alguna vez has escuchado la regla HCH? Halago, Corrección, Halago; podría sonar absurdo, cómo corregir y halagar al mismo tiempo, para Cameron esta regla puede ser la diferencia. No sólo se trata de corregir a quien mal hace las cosas, se trata de encontrar soluciones que puedan implementarse y que la persona comprenda y aprenda; cuando aplicas el HCH no sólo se refuerza el propósito, también se crean canales de confianza y comunicación con los empleados: ganar-ganar.
6. Los emprendedores dicen: ‘hasta aquí con los pretextos’, los empleados dicen: ‘no es culpa mía’
¿Te suena familiar? Ya sea el compañero de trabajo, la máquina en la que trabajas todos los días, el ambiente, el dolor de cabeza, las malas instrucciones del jefe; cualquiera que se te ocurra, es un pretexto. Debes de comenzar a evitar dar largas y empezar a solucionar tus problemas de raíz, así que deja a un lado el por qué no y comienza a encontrar los motivos del por qué sí.
7. Los emprendedores conforman riqueza, los empleadosganan dinero
Puede ser que tengas un puesto importante y que tu salario sea una envidia, pero si llegas al final de año y tu cuenta aún está en ceros, esto no está funcionando. Para el autor existe una diferencia entre hacer dinero y hacer que el dinero crezca. Tres palabras clave: ahorrar, invertir y generar dinero. ¡Piénsalo!
8. Los emprendedores vuelan con las águilas, los empleadospicotean con los pollos
Las relaciones laborales y personales influyen en cada decisión y acto que cometemos día con día. Para Cameron el deslindar la vida personal de lo profesional no es una opción, definitivamente es algo imposible. ¿Por qué la anotación? Porque si te juntas con aquellos que te distraen y no aportan, con aquellos que roban en lugar de dar o con aquellos que juzgan y no hacen, seguramente te convertirás en uno de ellos. Más vale ser selectivo y distinguirte, que ser influenciable y camuflajearte.
9. Los emprendedores ven hacia el futuro, los empleados ven hacia el pasado
Pocos comprenden el poder de la visión, y es por ello que la mayoría son empleados y no emprendedores, indica Cameron. Esta regla es aplicada tanto en la vida profesional como en la personal, si lo que haces lo haces por hacer y no con un propósito que pueda atraer beneficios, es el primer error. “Los empresarios usan la visión para crear una aproximación equilibrada a la productividad. Equilibramos nuestro tiempo planeando el futuro y actuando en el presente”.
10. Los emprendedores asumen riesgos porque tienen fe, los empleados optan por la seguridad porque temen
¿Cuántas veces no has leído sobre tu circulo de confort? Se trata de salir, explorar, crecer y volver a hacerlo. Pensar en estar cómodo puede ser seguro en el momento, pero dañino para construir un futuro. Es tiempo de arriesgarse y creer en lo que haces, esto no sólo te ayudará a lograrlo, sino que seguro te llevará a mejores lugares.
martes, 11 de agosto de 2015
Siete cosas que hace un líder para liderar el cambio
Se revisó una base de datos de 2,852 reportes directos de 559 líderes. Los reportes puntúan a los líderes sobre 49 conductas y también evalúan su efectividad para liderar el cambio, específicamente su habilidad para influir sobre otros en la dirección que la organización quiere. Luego se analizaron a aquellos que tuvieron los puntajes más altos y bajos sobre la habilidad de liderar el cambio, y se comparó con las otras conductas.
Se encontró que algunas conductas ayudaron menos en cambiar a otros. Se encontró que dos de ellas tenía casi nada de impacto, así nos da una guía útil sobre que no hacer:
Ser amable. Las personas amables terminaron últimas en el juego del cambio. Sería muy fácil cambiar a las personas si lo único que se necesitara fuese una relación positiva y cálida con otro. Pero, no es el caso.
Dar incesantes peticiones, sugerencias y consejos. Esto es llamado comúnmente, molestar. Para la mayoría de los que reciben, esto es muy molesto y solo sirve para irritarlo antes que cambiarlos.
Luego se analizaron las conductas que si se correlacionan con una habilidad excepcional para impulsar el cambio. Se encontraron siete que realmente ayudan a cambiar a las personas.
1. Inspirar a otros. Hay dos formas de aproximarse a otros cuando se trata de motivar a otra persona a que cambie. De manera amplia, puede etiquetarse como “Empujar” y “Jalar”. Algunas persona intuitivamente empujan a otras, diciéndoles que necesitan cambiar, dando frecuentes recordatorios y a veces siguiendo estos pasos con una advertencia sobre las consecuencias de lo que pasará si es que no cambian. Se ha visto que esta aproximación no funciona muy bien.
La alternativa es el enfoque jalar, que puede emplearse de diferentes maneras. Estas incluyen trabajando con los individuos para fijar una meta, explorar caminos alternativos para alcanzar un objetivo, y buscar las ideas de otros para encontrar los mejores métodos para avanzar. Este enfoque funciona bien cuando te empiezas a identificar con lo que la otra persona quiere alcanzar haciendo un vínculo entre la meta y lo que se propone. Los líderes inspiradores entienden la necesidad para hacer una conexión emocional con sus colegas. Ellos quieren provocar una sensación de deseo antes que de miedo.
2. Notar los problemas. Mucho de los consejos sobre gerencia se centran en la necesidad de que los individuos mejoren su capacidad para resolver problemas; pero hay un paso importante que viene antes. Es la habilidad para reconocer problemas (para ver situaciones donde es necesario el cambio y anticipar problemas potenciales por adelantado.
Por ejemplo, en una compañía era común escuchar a las personas ser felicitadas por sus habilidades para gerenciar en crisis – rescatar proyectos al borde del fracaso, o entregar a tiempo un producto que estaba retrasado en su producción. Una nueva gerente reconoció este patrón como un problema serio. Ella lo vio no como un signo de trabajo duro, pero como un síntoma de un proceso roto.
3. Dar una meta clara. El granjero que intenta arar surcos rectos, elige un punto en la distancia y luego apunta en esa dirección. Las iniciativas de cambio funcionan mejor cuando todos miran hacia la misma meta. Así, las discusiones más productivas sobre cómo se propone cualquier cambio son aquellas que empiezan con una estrategia que sirva.
4. Reta a las formas de interactuar comunes. Los esfuerzos de cambios requieren a menudo de líderes que reten a las formas usuales de interactuar y encuentren formas de maniobrar alrededor de viejas prácticas y políticas – incluso de las vacas sagradas. Los líderes que son buenos en impulsar el cambio retaran incluso las letras que parece están escritas en piedra.
5. Construir confianza en su propio juicio. Esto es sobre mejorar el propio juicio, y mejorar las percepciones de otros sobre el mismo. Los buenos líderes toman decisiones cuidadosamente después de recolectar los datos de múltiples fuentes y buscar opiniones de aquellos que saben tendrá una visión diferente. Ellos reconocen que preguntar por el consejo de otros es evidencia de su fuerza y confianza, no un signo de debilidad. Porque su habilidad para construir la confianza en las decisiones que tome para cambiar la organización son muy altas. Si otros no confían en su juicio, será difícil hacer que cambien de la forma que quieres.
6. Tener valor. Aristóteles dijo: “Nunca harás nada en este mundo sin valor. Es la mejor cualidad luego del honor”. Cada iniciativa que hagas como líder, cada nueva contratación, cada cambio en el proceso de implementación, cada idea de un nuevo producto, cada reorganización que se implemente, cada discurso que entregue, cada conversación en la que sea difícil dar una retroalimentación a un colega, y cada inversión en una nueva pieza de equipo requiere valor. La necesidad del valor cubre diferentes aspectos. Algunas veces se escucha a las personas decir: “No estoy cómodo haciendo esto”. Nuestra observación es que una gran parte de lo que hacen los líderes y especialmente los que demanda cambios, demandan la voluntad para vivir en la incomodidad.
7. Hacer del cambio una prioridad importante. Una de las leyes de Newton de Termodinámica es que un cuerpo que permanece en reposo tiende a permanecer en reposo. Volverse lento, para y descansar no requiere esfuerzo, puede pasar naturalmente. Mucho de los cambios en el esfuerzo no eran exitosos porque se convierte en una de cien prioridades. Para hacer un esfuerzo de cambio exitoso, necesita limpiar las prioridades que compiten por ser la número uno. Los líderes que hacen esto tienen un enfoque diario para el cambio, llevan cuenta de su progreso y cuidadosamente motivan a otros.
Convertirse en una persona que motiva el cambio beneficiará cada aspecto de tu vida, en la casa y en el trabajo. Incluso te ayudará a cambiar a ti mismo
martes, 4 de agosto de 2015
LA ESENCIA DEL COACHING Y EL LÍDER PERSONALMENTE SEGURO
Parafraseando a John Maxwell podríamos decir que un "coach" es un promotor de líderes, y el liderazgo no se compra en una consultoría. En otras palabras, si usted como empresario promueve líderes, usted es un "coach". ¿Y cómo ser un gran promotor de líderes? Al respecto, Maxwell nos dice que para "ser un gran promotor de líderes usted debe ser una persona segura, porque llevar a su gente hasta la altura de su potencial puede significar incluso que lo superen". ¿Cuántos coordinadores, directores, gerentes, presidentes están preparados para asumir este desafío?
La historia de Andrew Carnegie, el magnate del acero de fines del siglo XIX y principios del siglo XX quien se convirtió en el hombre más rico del mundo en su momento, se caracterizó desde temprana edad por conocer gente importante de la ciudad. Este deseo nació en él después de haber vivido el derrumbamiento económico de su familia hasta llegar a niveles de gran pobreza, carencia y necesidad, que lo movieron a rodearse de personas que sabían más que él e inspiró la que hoy conocemos como la prestigiosa Universidad Carnegie Mellon que nació en las Escuelas Técnicas Carnegie en 1900. "Sólo una persona segura puede enfrentar esa posibilidad, pero sin tener ese modo de pensar, usted quizás compita con su gente en vez de desarrollarla", afirma Maxwell en su libro "Desarrolle los líderes que están alrededor de usted".
Harvey Firestone, al respecto tiene un par de frases geniales "es sólo a medida que desarrollamos otros que tenemos éxito permanente" y "el crecimiento y el desarrollo de las personas es la más alta vocación de liderazgo". ¿Cuántos de nuestros pequeños y medianos empresarios, cuántas de nuestras empresas familiares que son la gran mayoría en Colombia y en el mundo son conscientes de esto? y ¿cuántos tienen la valentía de actuar como Carnegie y rodearse de gente que sabía más que él? Honestamente, creo que muy pocos, y es porque tienen miedo, miedo de perder el control, miedo de que su mediocridad se ponga en evidencia. Quienes siguen este camino van cuesta abajo y no se darán cuenta nunca. "Los reconocimientos se olvidarán", "los monumentos se derrumbarán", "los trofeos se corroerán". "Pero lo que hacemos por otros será un impacto eterno en nuestro mundo". (Maxwell, 2007).
¿Estás preparado para la inmortalidad?
martes, 28 de julio de 2015
UN MUNDO ENLOQUECIDO POR EL CONTROL
Guix (2007) citando al filósofo y escritor Alan Watts, quien proclamó a mediados del siglo anterior que "El hombre civilizado no sabe lo que quiere", plantea que hoy esa situación ya está resuelta porque el hombre "lo quiere todo". "No quiere renunciar a nada, como si todo estuviera ahí fuera para ser consumido compulsivamente. Tal ilusión le está amargando la vida".
Continúa Guix diciendo que "este mundo en el que vivimos... lo hemos hecho cada vez más complejo, más complicado". Parece "como si la misión en esta vida fuera llegar a todas partes, hacerlo todo y tenerlo todo". De esta manera "acabamos viviendo más allá de nuestras posibilidades", y "quien más sufre este incesante acoso es, nada más y nada menos que nuestro cuerpo".
"En el intento de llegar a todas partes vamos dejándonos la piel, sufrimos". "Nos pasamos pensando en controlar nuestra vida. Porque en el fondo de eso se trata: querer controlar lo que nos sucede; querer controlar el futuro, tener ´claridad´; pasar por la vida ´evitando´que nos pasen cosas ´inesperadas´". "Sufrimos ante la posibilidad de que las cosas no sucedan como teníamos pensado, cuando queremos tener la máxima seguridad en todo". "¿Qué miedo se oculta detrás de la necesidad de controlar?"
"El estilo de vida al que nos estamos acostumbrando, a menudo como una indefensión aprendida, conlleva la aparición de una especie de personalidad ´controladora´ que se pasa el día con la alarma puesta. La ansiedad por controlarlo todo acaba descontrolándonos. ¡Cuánta energía gastamos cada día sufriendo por llegar a todo! ¡Por no fallar!"
"Las conductas de control generan disfunciones en nuestra conducta cuando no auténticas patologías".
"Tal como vivimos hoy es muy difícil que a la vuelta de la esquina nos encontremos con un depredador. Nuestros miedos son mayoritariamente construidos por nuestra mente, porque lo que nos espera al voltear la calle es el pago de una hipoteca, el enfado de nuestra pareja, la visita al médico o el estrés que nos causa vivir en la incertidumbre".
"Somos buscadores inquietos de relaciones causa-efecto de tal manera que no nos conformamos con manejar la información sobre nuestro medio, sino que acabamos por atribuirle significado. El resultado de este ejercicio acaba siendo una valoración emocional, motivacional... y cognitiva sobre el placer, el dolor y las capacidades y recursos de que disponemos para afrontar" cualquier situación. "El balance nos puede asustar, deprimir o estresar, del mismo modo que puede acrecentarnos, estimularnos o acomodarnos".
Detrás de las conductas controladoras sólo existe el miedo, y se manifiesta a través de diferentes mecanismos de control. ¿Qué hacer? En primer lugar, "se puede tomar conciencia de cómo lo hemos construido y darnos cuenta de cómo hemos aprendido a asustarnos ante ciertas situaciones o personas". El miedo a lo desconocido no existe, "sólo podemos tener miedo de lo que conocemos". "Y eso que conocemos, lo hemos aprendido de alguna manera". Entonces, es fundamental separar el miedo como emoción del objeto que lo ocasiona. También es clave "darse cuenta de cómo utilizamos ese objeto en nuestra imaginación". Porque así como la imaginación es poderosa, también nos puede destruir. "A partir de ahí cabe un ejercicio de deconstrucción, capacitarnos en el arte de desaprender".
Todas estas son un conjunto de reflexiones para los que decidan descontrolarse.
jueves, 16 de julio de 2015
DIRIGIR UNA EMPRESA, TOMAR DECISIONES Y SEGUIR CRECIENDO
Mientras que el (IAT) refleja en qué medida un país crea y difunde tecnología, y construye una base de conocimiento humano, el (IDH) da cuenta del progreso humano, y el (GCI) mide cómo un país utiliza los recursos de que dispone, así como su capacidad para generar prosperidad para los habitantes; lo que es relevante destacar aquí es que el análisis de la información brindada por estos índices permite obtener conclusiones importantes, y la más esencial de todas está ligada a la "toma de decisiones", que para acertar será necesario desarrollar una visión sistémica y holística, comprender los retos que nos plantea la sociedad del conocimiento, así como, darle un nuevo enfoque al desarrollo, de manera que éste se centre en la valorización del capital humano. Y es aquí en donde me quiero detener.
El desarrollo del capital humano requiere que las personas tomen decisiones difíciles, porque así como los países responden de manera distinta al desarrollo, las personas también; y de acuerdo con su nivel de respuesta unos avanzan más que otros, o mejor aún, cada uno se estanca en un determinado nivel.
John Maxwell (2008) presentó un modelo sugerente de seis niveles, ¿en cuál te encuentras?
"Nivel 1. Algún crecimiento.
En este nivel algunos experimentan crecimiento a muy bajo ritmo y sin dirección. Tal vez sean competentes, pero nunca brillan en sus cargos".
"Nivel 2. Crecimiento que los capacita para su trabajo.
Muchos creen erróneamente que la meta final de su desarrollo es sólo hacer bien su trabajo. No lo es. Muchos que no tienen un buen promotor o un firme deseo de crecimiento personal detienen su proceso de desarrollo en este punto".
"Nivel 3. Crecimiento que los capacita para reproducirse en su trabajo.
Aquí se encuentran los que están capacitados para entrenar a otros en su área de pericia, pero no tienen habilidades de liderazgo.
"Nivel 4. Crecimiento que los lleva a un nivel más alto en el trabajo.
Aquí se encuentran las personas dispuestas a crecer tanto personal como profesionalmente. Parece un salto fácil, pero no lo es. Quienes lo logran no solo crecen en experiencia, sino que amplían su pensamiento, lo que los hace más valiosos para la organización.
"Nivel 5. Crecimiento que les permite llevar a otros a un nivel más elevado.
"En este nivel empiezan a emerger los grandes líderes. Estos individuos son verdaderos promotores de personas, y en poco tiempo amplían el valor de sus líderes y organizaciones, es más, los multiplican".
"Nivel 6. Crecimiento que los lleva a poder efectuar cualquier trabajo.
Son muy escasos los que se desarrollan en este nivel, y forma parte de una vocación personal de ayudar a las personas a lograr llegar hasta acá; se requiere un trato con mucho amor y respeto. Quienes aquí se encuentren triunfarán en cualquier parte, porque tienen "habilidades y fuerzas que trascienden cualquier campo particular o industrial". Si llegaras a encontrar a una persona así en tu camino, únete a ella y llegarán a generar un impacto más allá de las propias capacidades.
¿En qué consiste su trabajo como empresario o director? Dice Maxwell que consiste en descubrirse como promotor de líderes, caminar con cada uno y ayudarlo a medida que desee mantenerse creciendo; y si en algún momento el crecimiento se detiene deberá abandonarlo porque uno no puede forzar a alguien a que se mantenga creciendo. Esto también es una decisión, y muy difícil. Y así como sucede con las personas, sucede también con las empresas y los países. De allí que sea tan pertinente en ciertas circunstancias aquel adagio "Tenemos los dirigentes que nos merecemos".
viernes, 3 de julio de 2015
EL PROFESOR EXCEPCIONAL
:Waldo Mendoza , Doctor en Economía de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP). Profesor e investigador del Departamento de Economía de la PUCP.
El Dr. Waldo Mendoza, profesor e investigador de la PUCP examina el libro de Ken Bain historiador y pedagogo norteamericano para señalar las cualidades que hacen excepcional a un profesor universitario. Los hallazgos del libro indican que dichos profesores crean un entorno para el aprendizaje crítico de sus alumnos y los preparan para que hagan distintos tipos de trabajo intelectual, no para que sean buenos haciendo exámenes.
La educación es un determinante importante del progreso económico. La calidad de la educación depende de la calidad de los profesores. ¿Cómo es un profesor de calidad excepcional? Ken Bain, historiador y pedagogo norteamericano, responde a esta pregunta en un libro fascinante que las autoridades y los profesores peruanos deberíamos leer.
El libro de Bain, “Lo que hacen los mejores profesores de la universidad” (Universidad de Valencia, 2007), fue publicado originalmente por Harvard University Press, donde obtuvo el premio anual que dicha editorial otorga a la mejor publicación en educación y salud. Es el resultado de 15 años de investigación del autor, enfocado en el desempeño de 63 profesores considerados excepcionales por sus alumnos, colegas y sus instituciones, en universidades de EE.UU., en disciplinas tan diversas como el teatro o la medicina.
Cada capítulo del libro es la respuesta a una pregunta sobre lo que hace excepcional a un profesor universitario. ¿Cómo son los profesores excepcionales? Sin excepción, conocen su materia extremadamente bien. Son eruditos. Algunos cuentan con una lista impresionante de publicaciones; otros, no necesariamente. Estos últimos, sin embargo, son doctos en los desarrollos intelectuales de punta.
¿Cómo preparan sus clases? Consideran la preparación de las clases como un esfuerzo intelectual tan exigente e importante como su investigación. Son minuciosos, detallistas y centran el interés en fomentar el aprendizaje, más que en transmitir las verdades de la disciplina.
¿Qué esperan de sus estudiantes? Lo mejor. Tienen expectativas muy altas sobre ellos. Están seguros de que pueden conseguir peras de los que otros consideran que son olmos.
¿Cómo se desempeñan en el salón de clases? Los estilos varían, pero todos los profesores excepcionales intentan crear un “entorno para el aprendizaje crítico natural”, donde los estudiantes aprenden enfrentándose a problemas relevantes y desafiantes. Tienen buena oratoria, capacidad de comunicarse verbalmente de forma que estimula el pensamiento y consideran que la capacidad de hablar bien es una destreza importante que vale la pena refinar tanto como la de escribir. Los profesores excepcionales rara vez utilizan los mismos recursos en todas las clases.
¿Cómo tratan los profesores excepcionales a sus estudiantes? Algunos de ellos son tímidos y otros extrovertidos; algunos muy formales y otros no tanto. Sin embargo, todos utilizan siempre un lenguaje cálido, muestran una gran confianza en sus estudiantes, se muestran abiertos y de vez en cuando hablan de su propia aventura intelectual. Para ellos, la clase no es un espacio para demostrar su brillantez o para ejercer el poder sobre los estudiantes.
¿Cómo evalúan a sus estudiantes? Tienen algún programa sistemático para poner a prueba el aprendizaje de los estudiantes. Para ellos, los exámenes son una extensión de la clase. Preparan a los estudiantes para que hagan determinados tipos de trabajo intelectual, no para que sean buenos haciendo exámenes.
Ken Bain está convencido de que la buena docencia puede aprenderse, y los hallazgos de su libro pueden servir perfectamente a todo profesor, de escuela, colegio, academia, instituto tecnológico o universidad. Leer a Bain nos puede ayudar a ser mejores profesores, quizá excepcionales, y contribuir así al progreso económico de nuestro país.
lunes, 29 de junio de 2015
10 STEPS TO KEEPING EMPLOYEES ENGAGED AND MOTIVATED
Whenever a company supports its employees, turnover rates drop significantly.
By raising motivation levels, worker turnover can be reduced up to 53 percent.