jueves, 27 de febrero de 2014

LOS JÓVENES Y SU VISIÓN DEL FUTURO

La semana pasada asigné una lectura a los estudiantes de grado 11° titulada “El Estado del Futuro”, publicada en el informe The Millenium Project, en la que les solicité que me dieran a conocer sus comentarios al respecto, en una página; y me encontré con ideas muy interesantes. Hoy quiero compartirles lo que piensan acerca del futuro de nuestro planeta Diana Katherine, Catalina, Andrés Fernando, Sergio, Johan y Juan Felipe; y para ser fiel a sus ideas las transcribo textualmente:

“El mundo ha mejorado pero tiene aspectos por mejorar en educación, salud y expectativas de vida… (sin embargo) la mitad de la población no cuenta con esto, y se encuentran inestables, mientras que los gobiernos no toman decisiones acertadas,… y sólo piensan en algunas personas y no en los pobres.”

“Si se quiere un mundo mejor creo que deberían empezar ayudando a las personas que en realidad lo necesitan.”

“Es importante que las personas que representan a un país observen lo que sucede, los problemas que se avecinan, tanto económicos como políticos y enfocarse en hacer una buena política… sean honestas y digan NO A LA CORRUPCIÓN, concentrándose en el bien común y en las problemáticas que nos aquejan.”

“El mal manejo en la toma de decisiones, por falta de ética en las élites del poder, genera inestabilidad en precios, corrupción, crimen, cambio climático y lucha de clases.”

“Si queremos mejorar el mundo y que ganemos en todos los sentidos, se requiere que actuemos sobre los problemas, llegando a soluciones efectivas, que todos cooperemos por conseguir un mundo mejor,… en menos tiempo.”

“La construcción de un mundo mejor se logra no solo con las personas de gran capacidad económica, no podemos ser indiferentes a los problemas que viven los demás, si estamos en el mundo es para luchar por él y enfrentar cada uno de los problemas.”

“Querer un mejor mundo para cada uno no es nada fácil,… tenemos voz para unirnos y ayudar a nuestro planeta.”

“Si elegimos a alguien para que nos represente tiene que ser una persona que se haya formado con valores para asumir este cargo de gran importancia,… haciendo cumplir lo que los ciudadanos necesitan.”

“Un mejor mundo debes exigirlo, hacer saber lo que piensas.”

“Los problemas sociales y económicos se deben resolver con nuevas ideas.”

“Cuando nuestro mundo tenga una idea de cómo hacer las cosas bien nuestro futuro cambiará.”

“La esperanza no está perdida, la humanidad ha logrado muchas cosas que eran imposibles.”

“El planeta tierra está en gran riesgo,… las grandes multinacionales se exceden en el uso de los recursos naturales, perjudicando el medio ambiente.”

“Si el gobierno invirtiera más en educación pensando en el futuro, el país crecería más, ya que habría más gente capacitada y competente para aprovechar las nuevas tecnologías.”

“No todo avance genera cosas buenas, en el camino del gran crecimiento se van dejando cosas muy importantes atrás.”

“En un mañana ser rico o tener alguna influencia no servirá de nada, cuando luchen hermano contra hermano por sobrevivir.”

“El futuro puede ser desconfiable, a veces tenebroso,… nos acecha sin avisar, y aunque uno no esté preparado se debe adaptar a él.”

Esta es la voz de los jóvenes, ¿cuáles son tus acciones capaces de crear un mundo mejor en casa y en tu trabajo? ¿Son acaso tus acciones creadoras de futuro? ¿Son tus acciones coherentes con la manera como los demás te perciben? El futuro se construye HOY. Lo que quieras que suceda mañana, será fruto de tus decisiones actuales.

viernes, 21 de febrero de 2014

GENTE CON OLOR A SER HUMANO

Un gran amigo, Fredy Garzón, sacerdote carmelita, me ha compartido este gran mensaje que quiero ofrecerte, para que tengas la oportunidad de mirar cómo sales de este test al que quisiera llamar la “Gente que me gusta”:

Gente que saque a pasear a sus niños con el mismo entusiasmo que saca a pasear a sus perros.

Gente que le hable a sus vecinos como le habla a sus plantas diariamente.

Gente que le sonría a los demás como le sonríe todas las noches al televisor.

Gente que dispense tanta atención a los que los rodean como igual hace con su computadora.

Gente que esboce una sonrisa cuando pueda mirar.

Gente que salude cuando alguien se aproxima.

Gente que escuche la naturaleza como si intentara escucharse a sí misma, o al radio con los audífonos que le mantienen ajeno a lo cotidiano.

Gente que adore, mime y cuide a su familia como adora, mima y cuida a su auto, sus aparatos eléctricos o sus mascotas.

Gente que esté siempre dispuesta a colaborar como siempre está dispuesta a contestar su celular.

Gente que cuando se mire en el espejo mire más allá y se mire el alma, no el armario que lleva encima.

Gente que cuando hable proponga, no que disponga ni sea conflictiva.

En fin, gente que huela a… ser humano.

jueves, 20 de febrero de 2014

¿HASTA DÓNDE LLEGARÍAS SI TU FELICIDAD ESTUVIERA AMENAZADA?

¿Qué harías si tu felicidad estuviera amenazada? ¿De qué eres capaz cuando estás decidido a buscar el perdón y el amor perdido? Esta magnífica película muestra al amor y al odio, enfrentados en medio de una relación matrimonial.

Vivimos constantes crisis en nuestra relación de pareja, algunas de ellas son muy profundas, ¿qué saldrá de ti en ese momento?

Vívela en el siguiente link:

lunes, 17 de febrero de 2014

UN MUNDO DE LOCOS

Vivimos en un mundo dominado por la locura de la competitividad que nos introduce en una dinámica social de andar corriendo detrás de todo lo que promete ofrecerle a nuestros hijos el “Éxito”, en lo que se propongan hacer con sus vidas.


Esta sociedad competitiva nos ha vendido un falso modelo a seguir, porque se enfoca en llegar. ¿A dónde? De esta manera los jugadores de cualquier deporte viven para el día en que lleguen a ser profesionales. Los hombres de negocios, nos dice John Maxwell, viven para trepar los escalones de la empresa con la esperanza de algún día llegar a ser directores o presidentes de la compañía. ¿En qué se equivoca la sociedad competitiva? En que la idea de llegar a disfrutar del premio anhelado es una simple ilusión. Estamos rodeados de personas que llegaron a alguna parte sólo para encontrarse a sí mismos tan insatisfechos como lo eran antes de triunfar. Eso explica la alta tasa de suicidios en los países desarrollados. ¿En dónde está la falacia? En pensar que la vida se trata de ponerse metas y hacer todo lo que esté a nuestro alcance por lograrlas. ¿Y por qué esto es un engaño? Es simple, y nos lo han dicho los abuelos, el objetivo del viaje que emprendemos por la vida no es llegar, a donde sea que queramos ir. ¿Cuál es entonces el objetivo? Enfocarnos siempre en lo que vamos aprendiendo mientras caminamos por la vida y en las personas a las que hemos convertido a lo largo del camino; así no caeremos en el peligro de pensar que cumplidas nuestras metas hemos concluido.

Somos seres inacabados e inacabables. Nadie debería poder decir es que yo soy así, como me dijo la semana pasada un estudiante, cuando le solicité una explicación acerca de por qué había asumido una actitud negativa ante un reto que se nos presentaba, y para el cual pensaba que ninguno se sentía suficientemente preparado. Las barreras que ponemos delante de nosotros son mentales no reales.

Los mejores técnicos nos han enseñado que debemos concentrarnos en el proceso de crecimiento. El técnico de la Selección Colombia José Pékerman nos dio a todos los colombianos una gran lección al respecto, pasamos de ser una selección de fútbol en el camino hacia la eliminación, a una selección clasificada y cabeza de lista en el mundial de fútbol, algo nunca antes visto ni oído por nosotros en nuestro país.

¿Qué debemos aprender? Que la presión por ganar o por ser el primero NO es el camino. En este sentido, me sorprende escuchar todavía a padres de familia que presionan de esta manera a sus hijos. Cada vez que tuvimos la oportunidad de escuchar a Pékerman en alguna entrevista pudimos notar que todo el tiempo hacía énfasis en la preparación, en el trabajo en equipo, en la buena voluntad para cambiar y en el deseo de que cada jugador diera de sí lo mejor. Es un enfoque en el proceso, no en el resultado. Ese es el secreto. Disfrutar del camino mientras se recorre, e interesarnos fervientemente no en el producto, sino en el proceso. Si éste es adecuado, el resultado final estará garantizado. Así mismo sucede con el crecimiento personal.

La tarea que tenemos los padres y maestros será entonces la de ser modelos de crecimiento, entusiasmarlos constantemente y recompensarlos. Si nos mantenemos creciendo cada día, habremos entendido la dinámica de la vida humana y la de hacernos personas.

viernes, 7 de febrero de 2014

CREO PERO NO PRACTICO

En la web de catholic.net publicaron el siguiente artículo relacionado con lo que significa vivir la fe. Te invito a que lo leas, reflexiones y actúes en consecuencia.

“Y con frecuencia se oye decir: «Creo pero no practico». 

«Dichosos nosotros si llevamos a la práctica lo que escuchamos (en la iglesia)… Porque cuando escuchamos es como si sembráramos una semilla, y cuando ponemos en práctica lo que hemos oído es como si esta semilla fructificara» (San Agustín). La vida cristiana, como la de Jesús, se fundamenta en dos actitudes: la humildad y la acción de gracias. 

"Practicar la fe" es amar a Dios sobre todas las cosas, muriendo al egoísmo y al pecado (la búsqueda del bienestar o del poder a toda costa; ponerse a uno mismo en el centro, ocupando el lugar de Dios). Y al mismo tiempo —con y como Cristo— traducir ese amor en el amor al prójimo. Y esto, en concreto, comenzando por los que nos rodean, en el ambiente de trabajo, en la familia, en las relaciones sociales y culturales.

De esta manera "la práctica de la fe" es, sencillamente, la vida cristiana bien "vivida", tal y como la pueden y deben ejercitar la mayor parte de las personas, en medio de la calle. La fe lleva a la oración y a los sacramentos, y "fructifica" en el trabajo por el bien material y espiritual de todos, especialmente de los más necesitados.”